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sábado, 22 de mayo de 2010

Hacia la quinta dimensión

El Otro Yo nació a finales de los ‘80, en la localidad de Temperley, al sur del Gran Buenos Aires. Los hermanos Humberto Cristian y María Fernanda Aldana, fundadores y estructura fundamental de la banda, ya habían tocado en varios grupos colegiales como The Friends o Los Apáticos. Fue por esos años cuando decidieron formar un nuevo proyecto, al que titularon El Otro Yo, en alusión a un poema de Rimbaud llamado Yo soy otro. Junto al baterista Omar Kischinovsky se dedicaron a profesar un estilo muy difícil de catalogar. Influenciados por el punk, el grunge y una gran cuota de experimentación entonces inédita en la Argentina, grabaron su primer demo de forma independiente, y lo llamaron Los Hijos de Alien. A falta de neologismos como “indie” o “kraut” se los señaló como “alternativos”. En 1994, la misma formación registró Traka-Traka, su primer CD.

Su extraño nombre llamó la atención del público rockero en general, tal como lo hacían sus shows en vivo. La extinta rockería El Cafetal (hoy 565) atestiguó la presentación platense de su tercera producción: Mundo (1995), frente a una concurrencia de no más de veinte personas. Por esos días, tras los parches de su batería se ubicó al hiperactivo Ray Fajardo -en reemplazo de Kischinovsky- compartiendo escenario con un cuarto actor-integrante del que nunca más se supo nada. A mediados de la década, después de editar un tercer disco llamado Los hijos de Alien (como su demo) lanzaron El otro yo del otro yo, una recopilación sintética de Esencia, una obra triple que contuvo un disco por integrante.

En 1999 se sumó al grupo el tecladista Ezequiel Araujo -ex Avant Press, grupo de Leo García- quien los acompañó grabando Abrecaminos (1999). El comienzo del nuevo milenio fue significativo por la banda: entonces fundaron su sello propio, Besotico Records, con el cual lanzaron su nueva placa Contagiándose la energía del otro, y editaron numerosas bandas del under como Victoria Abril o She Devils.

En el 2002 editaron Colmena, placa que fue sucedida dos años más tarde por Espejismos. En aquel momento el tecladista Ezequiel Araujo se alejó de la banda. Tras ello, en 2006, Plaza Moreno los recibió en un multitudinario espectáculo para celebrar el día del estudiante, actuando como figura central, taloneados por bandas locales como Nerd Kids y Ahora. Su séptima placa, producida por Billy Anderson (del grupo americano de grunge Melvins) se llamó Fuera de tiempo, y los consagró definitivamente en México. Dicha consagración se fortaleció con el lanzamiento de su siguiente disco, grabado en vivo, llamado Estallando tu lado salvaje (2008), que fue lanzado en simultáneo en nuestro país y en tierras aztecas. Tras quince años de militancia en el grupo, Ray dejo la batería siendo reemplazado por Ricky Rua, ex compañero del anteriormente incorporado Gabriel Guerrisi, otrora parte de Los Brujos.

El presente de El Otro Yo es consecuente con su filosofía: actualmente, Cristian Aldana preside la UMI (Unión de músicos independientes, organización de músicos autogestionados). También continúa observando fielmente, como lo hiciera en 2000 al fundar su sello, toda simbología orientada a predicciones futuras. Sobre todo esto y mucho más hablamos con el músico…

-¿Cómo resumirías la actividad de la banda desde la salida de su último disco?
-El disco salió hace un par de meses. Enseguida empezamos con nuestra gira, que se llama Ailobiu 2010, Hasta la 5ta dimensión, esperando el 2012. Ya tocamos en Rosario, Córdoba, Temperley, Haedo, sigue La Plata y Olivos…

-Ya que mencionás el 2012, ustedes tienen una concepción un tanto más positiva de lo que muchos interpretan para esa fecha…
-Sí, hay una teoría apocalíptica y otra, a la que adherimos, que postula que transitamos hacia otra dimensión, la quinta dimensión. Todo esto nos gustó para jugar un poco con el nombre de la gira.

-¿Por Ailobiu que se grabó en México?
-Nosotros viajábamos constantemente a México. Allí tocábamos con Paco Huidobro de la banda Fobia, hermano de uno de los Molotov. Nos mostró los discos que producía y así surgió la idea. Nos pareció bien grabarlo allá, aprovechamos una gira que se hizo en las pirámides y nos quedamos dos meses grabando en los estudios de Molotov, en el aparecen invitados como Quique de Café Tacuba, Tito de Molotov, Iñaki de Fobia… todos grupos muy importantes que terminaron aportando lo suyo. Fueron dos meses divinos, nos recibieron muy bien. Hay un cariño especial con los argentinos, nos trataron bárbaro.

-Actualmente presidís la UMI ¿Qué le aconsejarías al músico platense que te está leyendo?
-Creo que vivimos en un sistema donde muchas cosas funcionan desde un lugar burocrático. Si vos realmente querés cambiar algo que no te gusta, el mejor camino no es la violencia o la destrucción, sino la información. Informándonos debemos defender los derechos que tenemos como personas, y en este caso como músicos. Entre toda la burocracia están escondidas las herramientas para generar los cambios reales. Es mucho más efectivo que ir a tirar piedras a la puerta de un lugar donde no te atienden bien. ¿Sino qué pasa? En definitiva, sólo logras que a vos te metan en cana por romper una ventana, el vidrio se cambia y no pasa nada. En definitiva, y lamentablemente, esa forma primaria de bronca, no genera ningún cambio. Eso lo digo desde mi experiencia con la autogestión, la que transité con el grupo. Para generar soluciones se creó la UMI.
Algo destacable de esto son las charlas sobre derechos de autor o de intérprete que se ofrecen. Los chicos que empiezan con la música hoy pueden acceder a una información que nosotros no teníamos. Es un buen punto de partida. La página también tiene un desarrollo importante. El futuro está en la autogestión y el desarrollo de la información es importante para que todo avance.

-Rebobinemos quince años… Cuando vinieron a presentar Mundo a La Plata ¿La banda tenía un integrante mas? En La Plata no se supo si por entonces eran o no un trío.
-Vos te referís a Daniela Cugliandolo, una actriz a la que llamábamos para los shows. Hacía diferentes performances (se intercambiaba numerosas mascaras en alusión al nombre del grupo). Tiempo después tocó junto a la banda el teclado, hasta que se fue a vivir a España.

El Otro Yo, Nirvana y Los Brujos

-Se dice que cuando Nirvana visitó nuestro país, en 1992, ustedes intentaron conocer a Kurt Cobain disfrazándose de periodistas...
-Nosotros teníamos un amigo que trabajaba de cadete y entraba a los hoteles en forma natural, para hacer trámites. Nos contó que Nirvana estaba parando en el Sheraton, y que sabía en qué habitación paraban. Así fue que decidimos, junto a María Fernanda, colarnos para llevarle nuestro primer casete, Los hijos de Alien. Había muchos fans en la puerta. Nosotros logramos entrar directamente.
-¿Se disfrazaron?
-No, la verdad es que entramos así nomás, como panchos. Subimos y nos atendió Courtney… medio sacada…
-¿Colocada?
-De mal humor. Cuando le contamos para qué habíamos ido realmente cambió su humor y nos trató bárbaro. Nos dijo que Kurt estaba descansando y que no podía atendernos, así que le dejamos nuestro disco. Después llamamos por teléfono a las otras habitaciones y logramos entrevistar a Krist Novoselic y a Dave Grohl, para después escribir una nota en un fanzine. Ahí charlamos un rato largo, terminamos hablando de toda la escena de bandas que había influenciado Nirvana, como Pixies o Sonic Youth. Se generó muy buena onda y les regalamos nuestro casete.
-Actualmente en El Otro Yo tocan dos integrantes de Los Brujos. Mucho se especula con que Nirvana se inspiró en Kanishka para componer Very Ape, uno de los temas lanzados al año siguiente en In Utero… No me digas que nunca hablaron sobre eso…
-Con Gaby lo hablamos. Al escuchar los temas es muy difícil no darse cuenta el parecido que hay con Kanishka. Sabemos que Nirvana realmente vio su show (eran teloneros) y que se llevaron su disco de regalo. No sería tanta casualidad teniendo en cuenta que Cobain no tenia miedo de decir que habían hecho temas basándose en los Pixies. Capaz que con Los Brujos pasó lo mismo, porque el tema es muy parecido. Es igual.

El Otro Yo se presentará hoy a las 19 en el Teatro Opera, calle 58 (e/ 10 y 11).
Federico Valenti

Diario Hoy

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